El día en que una mujer pueda no amar con su debilidad sino con su fuerza, no escapar de sí misma sino encontrarse, no humillarse sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida y no un peligro mortal.
Simone de Beauvoir
Esta vez si empiezo y... quería publicar algo, pero no sabía qué. Pero, al ver un par de publicaciones sobre el tema, me motivé.
Tengo una fuerte opinión sobre esto, se que quizá, es un tema muy tratado, y además bastante delicado...pero que a no todos nos queda claro. A pesar de ser un tema extenso, quería volcar mi postura sobre esto y lo hago con conocimiento de causa.
Todas en algún momento hemos sufrido situaciones de violencia, ya sea en la familia, en la escuela, con los pares, en el trabajo, la uni, etc. Y sí, somos las más vulnerables. Sostengo esto porque creo que no hace falta abordar ningún trabajo de investigación ni un censo. Basta con hablar con un amiga, con mamá, la abuela o qué más más obvio que la televisión, o qué mejor nosotras mismas.
La violencia hacia la mujer también pasa más allá de un golpe, es decir de la violencia física. Puede ocurrir con un insulto en fin, de mil formas.
Como podemos ver, si sólo nos paramos un cachito donde estamos, podemos verlo, ahí nomás, muy cerca. Son muchísimos los casos, desde un violación hasta una discriminación porque "ella" era muy flaca o muy gorda o porque era "traga", etc.
Saber, lo sabemos. Pero, ¿por qué?.
Algo que juega muy a favor de la violencia hacia la mujer son los medios de comunicación. Definitivamente no es el origen, pero hoy día es el reproductor. Basta con prender la tele que seguramente vamos a ver a esa chica que tanto ansiamos ser en una publicidad de un perfume o de ropa; o quizá una novela o película donde la mujer en cuestión sólo la muestran planchando, lavando y haciéndose cargo de todos los quehaceres del hogar o por qué no, la tonta con perfil de modelo que sólo sirve para ser bien vista por su aspecto. Pero éstos no son más que estereotipos que los medios de comunicación reproducen y nosotras lo acatamos. Quizá algunos lo crean inofensivo y sin importancia pero gracias a esto, muchas chicas mueren de anorexia, o sufren de problemas emocionales, entre nosotros podemos a llegar a lastimarnos con palabras nada más.
Pero, los medios de comunicación no son los únicos. Países del medio oriente son reproductores de una conducta ultra-machista que vuelcan sobre el sexo femenino. Pero como ya sabemos, es complejo de comprender muchas veces, y ante situaciones así no todas tenemos la fuerza para defendernos o salir corriendo. En estos casos la familia no ayuda y el Estado mucho menos. Por eso lo complicado y delicado del asunto.
En fin, la violencia se presenta de muchas formas. Detectarla a tiempo y denunciarla ayuda mucho.
Es importante saber que somos únicas y que no tenemos por qué ser como alguien que no existe. Y con esto me refiero a aquellas modelos tan bellas que... vamos..., la publicidad y las fotografías tienen arreglos de photoshop. Por eso, por quienes somos valemos infinitamente. Vale más ser como uno es, con unos kilitos de más, con el pelo con frizz, pero en fin con la sonrisa auténtica que representa esa que somos. Esa que se levanta por la mañana y saluda a mamá, papá y hermanos, a la abuela o a nuestra pareja. Esa que aconseja a su amiga o que con voluntad afronta otro día más. En fin, nuestro corazón es más valioso que un buen cuerpo o una ropa de marca. Somos valiosas por nuestros logros en la escuela, por ser buenas hermanas, buenas amigas o esposas, por hacer lo que nos gusta y nos edifica, y por sobre todo por conocer quienes somos. Saberlo es importante... ;)
